¡Hasta siempre, Kikín!

El sábado 21 de marzo nos marcó con la triste noticia del fallecimiento de Enrique Rispa Ramírez. Más conocido como Kikín, fue uno de los pioneros de la práctica del parabádminton en el Perú y la noticia de su partida nos deja con un hondo pesar. Y es que además de ser un gran deportista, Kikín fue extraordinario como persona.

Conoció el parabádminton por invitación de Pedro Pablo de Vinatea. Con la plumilla fue amor a primera vista y a partir de ese momento entrenó fuertemente para convertirse en un digno representante de nuestra bandera. Y así lo hizo.

 

En el año 2015 compitió en el Mundial de Parabádminton, luego estuvo en el Panamericano y posteriormente en un torneo internacional en Colombia. El 2018 quedó grabado por siempre en su memoria, pues logró subirse al podio en el Campeonato Sudamericano tras obtener la medalla de bronce en dobles.

Y aún cuando no competía, Kikín siempre estuvo ahí. No dejaba de animar a sus compañeros en cancha y era él mismo quien motivaba a la gente en la tribuna para gritar juntos “Arriba, Perú”. Su amor por la vida fue su sello distintivo, siempre buscando crecer y salir adelante. Por eso a fines de 2018 viajó a España para estudiar y seguir dándole batalla al cáncer.

Y es que así era Kikín, un luchador y amante de la vida. Así te recordaremos siempre. Tu ejemplo de lucha constante es el mejor legado que dejas en nosotros. Un abrazo al cielo, amigo. Te queremos.